Unos divertidos fantasmas le darán a tú árbol de Halloween ese aspecto terrorífico que tanto divierte a los más pequeños de la casa, y a los adultos en una noche de terror. Son originales, divertidos, económicos, creativos y mantendremos a los pequeñajos de la casa entretenidos durante horas. ¡que más se puede pedir!
Qué necesitas:
– Rollo de papel higiénico
– Trozo cuadrado de tela blanca, algodón o tipo visillo
– Hilo
– Pintura acrílica negra
– Pegamento
– Lentejuelas